[TESTIMONIO] Martina: Una lesbiana liberada

El testimonio que compartimos en exclusiva para Cosmovisión.cl es de una lesbiana, quien hoy se define como “liberada de esa identidad”. El relato es muy vivencial, y merece ser leído con detención.

Criada en una familia evangélica, Martina (nombre ficticio para proteger la identidad de los involucrados) experimentó el rechazo y abandono emocional de sus padres cuando era niña. También sufrió el abuso sexual al interior de su familia, experiencia traumática que no pudo superar y que despertó en ella odio visceral hacia los hombres y una fuerte atracción hacia las mujeres.

Al comienzo de su historia, la iglesia local no pudo ayudarla, sólo la destrozó cuando se hizo evidente su orientación sexual (la descubrieron en una relación con la líder nacional de jóvenes). Eso la llevó a meterse cada vez más profundo en el lesbianismo, del cual (después de muchos años de desenfreno) cuenta que logró salir.

Decidimos publicar el testimonio íntegro, después de varias horas de trabajo, por 3 razones:

1) La protagonista es pentecostal, grupo que representa al menos un 80% de los evangélicos en Chile. Las iglesias de esta corriente en particular están llenas de historias como la de Martina (incluso: hablan de transformaciones más impresionantes). Elementos del relato pueden dejar sin palabras a los escépticos, pero ahí está su testimonio como evidencia de que algo genuino ocurrió en su vida.

2) Ella compartió su historia con mucha cautela, no quiere que se preste para discusiones interminables sobre un tema que en definitiva es personal. No es su intención juzgar a nadie, sino que quizás alguien se identifique. La conocí hace 10 años, cuando yo lideraba un ministerio universitario, y ella recién estaba iniciando el proceso de sanidad interior. El tiempo ha pasado y hoy es efectivamente otra persona.

3) Así como las iglesias evangélicas están llenas de testimonios como el de ella, también hay cristianos genuinos que luchan y sufren por la Atracción al Mismo Sexo (AMS), algunos de los cuales quizás jamás dejarán de sentirse homosexuales. Su historia debería motivarnos a ser más comprensivos con las personas en esa condición, y a evitar que situaciones que provocan quebranto sexual se repitan.

¿Todas las personas gay desarrollan su identidad sexual de la misma manera, experimentan las mismas dificultades, o necesitan pasar por las mismas situaciones de Martina para entregarse a Cristo? No.

Sin embargo, hay algo que nadie puede arrebatarle a las iglesias evangélicas (los profesionales que trabajan en rehabilitación lo saben mejor que nadie) y son los testimonios de vidas transformadas por la fe. Lo de Martina es sólo una muestra.

Puedes descargar el documento completo (para imprimir) aquí.

O leerla por partes:

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