[ESPECIAL] 2019, el año de los evangélicos

3) Legalización de la marihuana con fines terapéuticos

Otro proyecto que se está discutiendo con mayor intensidad en el Senado es la “Legalización del auto cultivo de marihuana con fines terapéuticos”, en 2do trámite constitucional (Boletín 11327-11, Senado).

Se dice que el aceite de cannabis ayuda en el tratamiento del dolor para pacientes con cáncer y otras enfermedades crónicas. En enero se recibió a diferentes expositores, entre ellos la Fundación Daya (promotora de la idea) pero también a reconocidas agrupaciones médicas: la Asociación Chilena de Pediatría y a la Sociedad Chilena de Psiquiatría y Neurología de la Infancia y la Adolescencia”. Sus presentaciones, en base a evidencia científica, fueron categóricas.

“La marihuana daña a los niños. Los preparados artesanales (supuestamente medicinales) también dañan. Y los niños enfermos merecen las mejores medicinas. Se requiere financiar estudios independientes para determinar si el aceite de cannabis realmente ayuda a los niños con epilepsia refractaria, y cuales son además sus efectos nocivos (caso Talidomida). Ninguna droga puede entrar por la ventana: es urgente apoyar modelos de prevención”, aseguró a la Comisión de Salud el 7 de enero el pediatra Dr. Humberto Soriano.

El médico indicó que la evidencia científica contra el consumo de cannabis en niños es brutal: “Uso regular deteriora funciones cerebrales y se asocia a: Problemas de aprendizaje. Bajo rendimiento escolar. Deserción escolar. Su consumo persistente produce: Baja del CI en 8 puntos. Y el daño es irreversible”.

Por su parte la neuróloga pediatra Dra. Verónica Burón, advirtió que en sus 35 años de ejercicio ha visto cómo surgen fármacos que se han aprobado, para luego descartarse por efectos adversos, en base a evidencia científica: “No se puede promover un producto y ser simultáneamente productor de un producto, pues hay conflicto de intereses”. Sobre las alternativas clínicas para el tratamiento de epilepsia refractaria, señaló que muy pocos pacientes responden a los fármacos disponibles cuando son bien administrados, y que hay buena expectativa cuando se modifica la dieta del paciente y eventualmente se corrige con una cirugía.

“Ya existe la experiencia de suministrar medicamentos en base a cannabis en Colorado (EUA). De los numerosos estudios de marihuana en epilepsia, no hay evidencia que sustente su uso. No se ha demostrado su eficacia y seguridad”, aseguró.

Otro de los expositores en la comisión fue el pastor Francisco Javier Rivera. A partir del trabajo social que realizan los evangélicos en la prevención y superación de adicciones y drogodependencia, el representante evangélico advirtió el 24 de enero en la Comisión: “Aunque el proyecto de Ley no permite el consumo de marihuana por combustión (fumarse un pito), al permitir el autocultivo no hay manera de controlar el consumo doméstico de cannabis. Esto va a dañar mayormente a los jóvenes entre 12 y 25 años donde está concentrado el mayor consumo. Es un desastre de Ley”.