El 4 de octubre representantes nacionales de iglesias cristianas le manifestaron al Gobierno su parecer unánime sobre proyectos de Ley enviados por el Ejecutivo y que se encuentran en trámite legislativo.
La carta (un hecho inédito en la historia de Chile) fue entregada al ministro Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, y en ella rechazaron las iniciativas que pretenden legalizar el aborto terapéutico y el reconocimiento a las parejas del mismo sexo.
Firmaron la misiva los obispos: Ricardo Ezatti, arzobispo Católico, Sergio Abad, arzobispo Ortodoxo, el arzobispo Anglicano, Héctor Zavala, el líder de la Mesa Ampliada, Emiliano Soto y el Obispo Roberto López, de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, junto al Obispo Francisco Anabalón de la Iglesia Pentecostal Apostólica.
En su declaración conjunta, los líderes cristianos se refirieron a 3 proyectos emblemáticos. Señalaron que les parece «completamente improcedente que se legisle para introducir a nuestra patria el aborto. No existe ninguna razón que haga lícita una intervención directa con el propósito de privar de la vida al más inocente de los seres». Respecto al proyecto de Acuerdo de Vida en Común, los obispos expresan tajantemente su «rechazo a la legislación que pretende incluir en el ordenamiento jurídico las uniones de hecho entre personas del mismo sexo». Finalmente cuestionaron que en el proyecto que establece medidas contra la discriminación se use el término «orientación sexual», lo cual “ha distorsionado la sexualidad y las bases de la familia en otras naciones”.
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